Llegado el momento, nuestros cachorros se mudarán al que debiera ser su nuevo hogar, para siempre. Es inevitable sentir algo de pena al dejarlos ir, después de verlos nacer, a veces incluso de ayudarlos a tomar su primera bocanada de aire, y sentir esa incomparable sensación de alivio al escucharlos maullar por primera vez. Por eso es tan importante para nosotros perseguir la certeza de que cada uno de nuestros pequeños encuentre no solo la familia más amorosa y responsable, sino el hogar más adecuado.
La nueva familia de Bagheera
Nuestra pequeña Bagheera ha tenido mucha suerte. Desde el momento en que nos contactamos con Camila y Julian, notamos sus ganas de compartir todo su amor con su primera mascota como pareja. Escucharon atentamente nuestras recomendaciones y siempre mostraron interés en saber más. Pasaron las semanas, la ansiedad crecía y también sus esfuerzos por prepararse mejor para el feliz encuentro con su pequeña bengal.
Bagheera esperaba dentro de su bolso de transporte, como si supiera que ese día emprendería quizá el viaje más importante de su vida. Camila y Julian llegan a casa y se encuentran por primera vez con quien solo habían podido ver por fotos y videos. En su mente, Bagheera lucía mucho más grande y robusta. La pequeña vida que tendrían entre manos es más frágil de lo que imaginaban. Un gatito de tres meses y medio -la edad promedio en que nuestros cachorros salen de casa- corre, salta y juega como el adulto más intrépido, pero aún es una vida vulnerable que hay que proteger con extremo cuidado y sobre todo, que todavía tiene mucho que aprender. Camila y Julian le enseñarán cada rincón de su nuevo hogar y deberán hacerle entender, con cariño, los lugares más seguros y los que no lo son tanto. También lo que está permitido y lo que no. Bagheera descubrirá los lugares más cómodos para descansar, y los juegos que más disfruta compartir con su nueva familia. Ni qué decir de las nuevas delicias que probará y los numerosos juguetes que esperan por ella.
Una bienvenida responsable
Pero llegar a un lugar desconocido no siempre es fácil. Llevar una nueva mascota a casa es un proceso complejo que supone tomar especial atención a ciertas medidas que harán más fácil la vida del nuevo integrante de la familia.
Cuidado con la baja de defensas: los gatos son particularmente sensibles a cualquier cambio. Quizá sea difícil de distinguir en su comportamiento diario, pero no hace falta un nivel alto de estrés para afectar el sistema inmunológico de nuestro pequeño. Eso puede ser aprovechado por enfermedades oportunistas, que quizá no sean tan agresivas pero que podemos y debemos evitar. Los probióticos nos ayudarán a prevenir.
Tiempo al tiempo: cada cachorro es distinto. Algunos se acostumbrarán muy rápido y querrán explorar de inmediato. Otros prefieren la seguridad de su bolso de transporte o algún otro rincón donde se sientan protegidos. No podemos calificar ninguno de estos extremos como adecuado o no. No existen las fórmulas. Lo fundamental es darles espacio para que encuentren la seguridad que necesitan. Dentro de pocos días, deberían identificar su nuevo hogar como un lugar seguro y lleno de amor.
Nuestro rol de educador: desde el momento de su nacimiento, nuestros cachorros comienzan un proceso de aprendizaje social constante. Desde pequeños se acostumbran a nuestras caricias, al sonido de nuestra voz y nuestras muestras de afecto. Este proceso no termina el día de la mudanza, sino que debe ser reforzado y enriquecido por la nueva familia. Cada día será una nueva oportunidad para darle más amor y experiencias felices; pero también será una oportunidad para equivocarse. Así como no existe un manual para ser un buen padre, tampoco existe uno para no errar con nuestras mascotas. Pero si tu corazón está en el lugar adecuado, tienes una brújula muy potente como herramienta.
Lo que nunca deben olvidar es que aunque nuestros cachorros dejen el nido, ninguno de ellos nos abandona del todo. Quienes acogen a nuestros pequeños bengal cuentan con nuestro apoyo incondicional y sin límites. Camila y Julian, bienvenidos a esta gran familia.
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